Operativos de tránsito: ¿cuánto cuesta recuperar un vehículo retenido?

Operativos de tránsito: ¿cuánto cuesta recuperar un vehículo retenido?

Una moto secuestrada en un operativo de tránsito el fin de semana es un expediente más en el Juzgado de Faltas que está abarrotado de la cantidad de

Una moto secuestrada en un operativo de tránsito el fin de semana es un expediente más en el Juzgado de Faltas que está abarrotado de la cantidad de causas iniciadas. Pero detrás de ese “papeleo” hay historias de vecinos que con esfuerzo económico y sacrifico logran comprar un vehículo que finalmente no volverá a rodar a las calles, quedará arrumbado en el depósito a la espera de la compactación.

Esa es la parábola que se reescribe todos los fines de semana. Cada vez es más la cantidad de autos y motos secuestradas. Las causas radican en infracciones por alcoholemia, ruidos molestos o falta de documentación. Una vez que se produce la multa, se secuestran las unidades y recuperarlas implica hacer frente a un costo muy oneroso que explica de alguna manera por qué sólo 4 de cada 10 vuelven a la calle y el resto espera su destrucción.

Hoy el depósito municipal tiene 2 mil motos y 200 autos listos para compactar y ése es el resultado sólo de los últimos 2 años y medio, porque hace poco se había producido ya la entrega y limpieza del predio.

Nuestro país no tiene desarrollada una buena educación vial, y gran parte de las dificultades y esta guerra no declarada en las calles debe buscarse en la falta de educación, formación de valores y empatía. Lo demás, es una letra fría, la que imponen las leyes y ordenanzas que deben cumplirse. Pero el tránsito, primero, debería ser una acuerdo de convivencia en comunidad, una meta que en nuestro distrito no logramos aún concretar.

Las multas por alcoholemia positiva o ruidos molestos están reguladas por la ley nacional de Tránsito y establece penalidades económicas basadas en el valor de 300 litros de nafta, pero del valor del Automóvil Club Argentino con sede en La Plata, según resolución de la Dirección de Política y Seguridad Vial de la Provincia. Ese precio, sin bien se actualiza cada dos meses, es menor –afortunadamente para los infractores- que el que se paga en los surtidores de Trenque Lauquen.

  • Multa por alcoholemia positiva (300 litros de nafta): $ 23.970.
  • Multa por ruido molesto (caño de escape modificado): $ 23.970.

Es decir que un motociclista infractor por alcoholemia y ruidos molestos debe hacer frente a un cargo de 50 mil pesos, además de la inhabilitación para conducir por un plazo que fija el Jugado de Faltas, pero el mínimo es de 6 meses.

Pero no todo se termina allí. Los costos, son mayores. Además, a cargo del infractor debe pagarse el “acarreo” hasta el depósito que son unos 2 mil pesos más y como gran parte de los vehículos secuestrados no tiene documentación, los mismos no se entregan hasta que se cumplimentan: licencia de conducir, seguro, patente y  transferencia, entre otros.

Sino tiene licencia de conducir deberá tramitarla y el costo es de $ 2200; las transferencias más baratas de motos parten desde los $ 10 mil y la de los autos tienen valores desorbitantes. Luego entran a tallar otros gastos administrativos que son muy difíciles de promediar porque se calculan de acuerdo al valor del rodado como el seguro y la patente. Como se verá, la valuación final de una infracción es muy alta.

En la era digital, los agentes de tránsito ya no hacen más infracciones con papel y lapicera, sino que disponen de un dispositivo digital que una vez que cargan los datos ya se disparan al Juzgado de Faltas y al Registro Provincial, por lo que contar un multa sin resolver puede además bloquear trámites futuros para la obtención o renovación de licencia.

EDUCACIÓN Y VALORES

Una infracción de tránsito es un costo muy alto para una familia. ¿Debería ser ése una de las razones para que no existan infractores? Para María Córdoba, que está al frente del equipo de agentes de tránsito del Municipio se trata de educación, conciencia y valores.

“A nosotros nos toca hacer el papel de malos porque infraccionamos y secuestramos, pero no podemos pretender que un inspector de tránsito eduque a un automovilista o un motociclista en un operativo, los valores vienen desde casa” dijo consultada por este medio  y agregó que “el tránsito es educación, toma de conciencia y entender que ponemos en riesgo nuestra vida y la de los demás con algunas acciones”.

Cuando se le preguntó cuáles son las infracciones más comunes que encuentran reveló que gran parte de las motos que circulan carecen de la totalidad de la documentación que pide la ley de tránsito. Ellos trabajan con el marco normativo de la Ley de Tránsito Nacional, la de la Provincia y la ordenanza 4104, que en su artículo 237 faculta al Municipio a “levantar” las motos que sin luces, sin patente o caño de escape modificado.