Quién fue Enrique Vilbazo y por qué un centro de salud lleva su nombre

Quién fue Enrique Vilbazo y por qué un centro de salud lleva su nombre

Cuando era chico sufría de dolor de oídos y anginas recurrentes. El doctor Enrique Vilbazo, era el único especialista en otorrinolaringología en Tren

Cuando era chico sufría de dolor de oídos y anginas recurrentes. El doctor Enrique Vilbazo, era el único especialista en otorrinolaringología en Trenque Lauquen y por tal motivo era casi parte de mi cotidianidad, mis visitas eran recurrentes a esa estrecha sala de espera de su consultorio en calle San Martín. Aún recuerdo el fichero donde sacaban la historia clínica, los cuadros colgados en la pared, todos con los escudos del Partido Justicialista y uno que era una caricatura suya en el que tocaba un bombo.

Usaba una luz potente que colgaba de su frente con una especie de vincha metálica, masticaba chicle, hablaba poco y pausado, y daba su diagnóstico. También recuerdo que mientras firmaba papeles y hablaba con mi madre sobre mi afección, abría un cajón del que extraía medicamentos de muestra gratis para que no gastemos en la farmacia. Era un médico “social” de los que ya casi no quedan. La mitad de sus pacientes no llevaban bonos, ni pagaban visitas porque eran pobres y hacía domicilios si era necesario. Se dedicó a la salud pública de lleno, pero también a la participación en múltiples instituciones intermedias y a la política, en el peronismo.

El “Chueco” Vilbazo murió a los 75 años en el año 2013, pero 10 años antes y en un caso excepcional, tuvo su “reconocimiento en vida” cuando la Municipalidad denominó con su nombre el Anexo del Hospital, en la esquina de San Martín y Juan José Paso. Fue el reconocimiento por haber sido director del Hospital durante muchos años, y aunque hoy parezca difícil de entender ocupó ese cargo en gobiernos de signo radical.

Además de la salud, Vilbazo dejó su huella en instituciones como el Instituto Miguel Di Gerónimo, Biblioteca Rivadavia, Cooperativa de Electricidad, Club Argentino y otras. Entonces son varias las etapas para abordar su figura.

Según la información oficial, ingresó al Hospital Municipal “Dr. Pedro T. Orellana” para el ejercicio de su actividad profesional el 1° de diciembre de 1967, habiendo desempeñado desde ese momento el cargo de Médico Otorrinolaringólogo las funciones de Director de Bienestar Social (1969 – 1976), Director Interino del Hospital Municipal (1974 -1976), Director del Hospital  (1981 – 1982),  Asesor de la Dirección del nosocomio local (Ad honorem 1988), como Director del Hospital (1989 – 2001), Director Asociado del Hospital Municipal (Ad honorem 2002 al 2003).

Como se ve, fue el director del Hospital de la gestión Barracchia (1989 al 2001), quizás el momento de nuestra historia en la que la salud pública cobró el mayor relieve y fue reconocida en todo el país. Cómo un peronista de ley tuvo ese cargo tan importante en la gestión del gobierno radical de Barracchia. Según cuentan fuentes políticas, su relación de amistad se forjó cuando quien fuera elegido 5 veces intendente estudiaba medicina en Buenos Aires y allí conoció a Vilbazo. Su relación fue tan estrecha que caminaron juntos en la función pública.

Jorge Suárez, un histórico dirigente del peronismo trenquelauquense, le dijo a OESTE BA que la relación Barracchia – Vilbazo “era de mucho respeto y afecto”. Suárez acompañó parte de la historia política del médico peronista que pudo haber cambiado la historia contemporánea del distrito, si los resultados de la elección interna del PJ en 1983 hubieran sido distintos.

Vilbazo –según el relato de Suárez- tuvo una activa participación por el regreso de la democracia en los años oscuros de nuestro país, y en el distrito formó el Centro de Estudios Justicialistas donde reunió a peronistas que venían a renovar la fuerza. “Fue precandidato a intendente en 1983 y perdió la interna con  Abel Estévez, y luego en la elección general la UCR con Horacio Arrastúa ganó las elecciones. Era un gran candidato para el momento, luego de perder la interna no quiso volver a ser candidato nuevamente. Siempre fue un colaborador del partido y muy comprometido con las instituciones, colaboraba con todo el mundo, sé de casos que le prestó una casa a gente que no tenía donde vivir, y a estudiantes que les pagaba pasajes”, dijo Suárez.

EN LA COOPERATIVA

También lo recuerdan con mucho afecto es en la Cooperativa de Electricidad donde también fue un colaborador todo terreno.

Ingresó a la entidad como delegado en 1973  y permaneció allí hasta su muerte en 2013. Carlos Rey, histórico gerente de la entidad eléctrica, recordó así a Vilbazo, en un escrito que publicó hace 6 años en el diario La Opinión y ahora entregó también a OESTE BA.

Estas son las palabras que Rey le dedicó: “Resulta importante, recordar su participación dentro de la Cooperativa de Electricidad. Nos tocó compartir muchas horas de consultorio, hospital, oficina, viajes, hoteles, comidas, etc.. Y como un resumen, sorprendió su faceta de gran Cooperativista.

Desde el mismo momento que ingresó, se notó su presencia: respetado por todos, de pocas palabras, con una claridad conceptual envidiable, mostró su activa participación sobre todo en los temas relacionados con el espíritu solidario, que distingue al Cooperativismo. Además colaboró para el logro de una convivencia y armonía política,  envidiada por quienes nos visitaban: él era presidente de Partido Justicialista y René Deltour –otro integrante del Consejo- presidente de la UCR. Se conocían y el trato honesto, solo mostraba algunas cargadas, siempre evitando llevar a la Cooperativa los temas partidarios. Y resultó muy importante, para mantener la cordial y correcta relación con la Municipalidad.

Vilbazo volcó continuas propuestas y apoyos a todo lo relacionado con el mejoramiento de las condiciones de vida de los habitantes de Trenque Lauquen.

Particularmente, los Servicios Sociales, lo vieron como uno de sus más importantes puntales, desde la prestación directa de sepelios, con sus salas velatorias, la construcción de nichos, los Salones Comunitarios, etc.. Y sus trabajos fundamentales: el servicio de ambulancias, la donación de medicamentos y equipos para el Hospital, en sus peores épocas. Y también, la idea de destinar los productos de la venta del ex Matadero, para realizar la nueva Sala Cooperativa modelo, inaugurada el 15 de abril de 1998.

Es justo extenderse en este importante servicio. Enrique, como profundo conocedor de los temas propios de su profesión, se encargó de enseñarnos todo. Desde el vehículo y su equipamiento, hasta la elección del personal encargado, “que no solamente debe manejar la ambulancia”. Llegaba a la Cooperativa a las 7 de la mañana, luego de su caminata por el Parque, llevando las novedades del día –mejor dicho, de la noche- del funcionamiento de la ambulancia. Su control era estricto.

Otra tarea fundamental, que realizó por años, fue lo relacionado con Becas, desde su Reglamento. Su amplia experiencia con jóvenes y familias, se notaba en la justicia de las opiniones que volcaba en las reuniones y las disposiciones posteriores de la Comisión.

Es de resaltar, que, durante muchos años, no cobró nada por tal importante tarea. Peleando con él, se logró acordar un monto. Al tiempo, nos enteramos que lo donaba…así era el Chueco. 

Si los vecinos de Trenque Lauquen, tenemos buenos servicios sociales, es justo recordar y rendir un gran homenaje a excelente persona, que fue Enrique “Chueco” Vilbazo. Y desear que su ejemplo sea imitado para el bien de toda nuestra sociedad”, escribió Rey.

EL ANEXO VILBAZO

La ordenanza 2347 del año 2003 es la que impone su nombre al Anexo, en un caso único de reconocimiento en vida. “sería oportuno en el acto de habilitación imponer el nombre de un profesional de compromiso permanente con la salud pública, no solo a modo de identificación del lugar sino como reconocimiento expreso a la trayectoria en el ejercicio de su labor”, señala en los fundamentos la ordenanza.

Agrega que “sin desconocer el mérito con que muchos otros profesionales cuentan, la Municipalidad de Trenque Lauquen entiende que el Dr. Enrique Vilbazo por su trayectoria es merecedor de dicho reconocimiento” y que su “vocación de servicio no solo se limita a su actividad específica sino que en el transcurso del tiempo ha sido y es un colaborador comprometido con instituciones intermedias, deportivas, estudiantiles y de servicio de nuestro medio”.

La iniciativa para esa designación por del por entonces intendente Juan Carlos Font.

PALABRAS DE DESPEDIDA

Fue docente y trabajó mucho por el Centro Universitario de Trenque Lauquen en La Plata y uno de los luchadores para que se radicara la UTN en esta ciudad.

Raúl Feito era intendente en el año 2013 cuando falleció Vilbazo y sus palabras fueron estas: “Era un buen médico, buen funcionario y todo, pero por sobre todas las cosas fue una buena persona y eso vale más que cualquier otro título o cargo que le tocó cubrir, desde el municipio un agradecimiento sincero” y esas palabras fueron en nombre de todos los trenquelauquenses que siempre recordarán con afecto a una figura destacada de la comunidad.

Nota: OESTE BA – Fotos Gentileza Archivo Hugo Tiseria