Laura “La Joya” Griffa se para debajo del gran reloj de pared en el living de la casa para tomar una de las fotos que acompañan esta nota, como si las
Laura “La Joya” Griffa se para debajo del gran reloj de pared en el living de la casa para tomar una de las fotos que acompañan esta nota, como si las enormes agujas estuvieran marcando el tiempo justo. ¿Será este su tiempo?, de sus palabras se desprende que entiende que el momento de hacer historia llegó y quiere que sea aquí, en su ciudad, ante su gente. El sueño del cinturón mundialista se mantiene más vivo que nunca y es hoy su misión.
Laura es, junto a su hermana melliza Paola, la más chica de 5 mujeres. De chicas jugaron al fútbol y participaron en diversas actividades deportivas, pero más tarde se radicó en Carlos Tejedor y luego en Pehuajó. Pasaron unos años hasta que retornó a su ciudad, y cuando lo hizo ya era “La Joya” una boxeadora aguerrida y de buena técnica a la que los periodistas nacionales le tiraban flores pero aquí aún no tenía su reconocimiento como trenquelauquense.
Una vez instalada en Trenque Lauquen y bajo la coordinación en el aspecto físico de Ezequiel Corea, y de sus entrenadores boxísticos Gabriel Marino (Carlos Tejedor) y Néstor Ferraro (Nueve de Julio), Laura dio un salto de calidad y mostró todo su boxeo en los cuadriláteros más importantes del país. El resto ya es historia conocida. Es campeona argentina y sudamericana y el año pasado tuvo su chance mundialista contra La Tigresa Acuña, algo así como un prócer del boxeo femenino, y no pudo contra el peso de esa historia. Pero lo mejor estaba por llegar. A fines del año pasado realizó una defensa del título sudamericano en Trenque Lauquen, ante un Polideportivo repleto de gente, ahora sí La Joya era de Trenque Lauquen y con ese plus, con ese entusiasmo, quiere revancha.
Arriba del cuadrilátero Laura Griffa es toda explosión y fuerza. Un huracán de golpes sin tregua, pero en el living de la casa es otra mujer. Con voz pausada y calma habla con Oeste BA de lo que pasó, pero sobre todo de lo que viene.
-¿Cómo llegas a la primera pelea del año?
-Muy bien. Tengo un excelente equipo, con Ezequiel Corea, Gabriel Marino y Néstor Ferraro de Nueve de Julio, siempre nos preparamos bien, sabemos que tenemos que dar lo mejor para tener otra chance mundialista.
-¿Qué conoces de la rival?
-A Lilian Silva la conozco porque debutamos en 2014. Es complicada, es zurda y tiene una mano fuerte. Es una pelea corta a 6 rounds, así que vamos a buscar una definición rápida. A mi las peleas cortas se me complican porque me suelto a partir del cuarto round, ahora tengo un plan de pelea para hacerlo más rápido, buscando una mano y que se resuelva rápido. Ojalá podamos poner en práctica el plan.
Esta es una pelea para empezar el año, para tener continuidad y para pensar en lo que viene.
-¿Cómo sigue el año?
-La idea es tener continuidad, volver a pelear en febrero o marzo y tengo una chance mundialista para abril o mayo, y mi promotor me preguntó si lo podíamos hacer en Trenque Lauquen, le dije que sí, quiero pelear en mi ciudad por el título del mundo, acá la gente me acompañó y le gustará tener un título en la ciudad.
Pienso que este año se va a dar, nos gustaría que sea la revancha con Acuña, yo sentí que podía dar más pero producto de los nervios no pude, estamos buscando esa pelea, es lindo poder hacerlo acá con mi gente, y mi familia.
-¿Te quedaste con ganas de revancha?
-Si porque los nervios no me dejaron hacer nada, estaba bien entrenada pero bueno es así. Me quedó como experiencia y esa experiencia la voy a capitalizar para lo que viene.
-Se vio que ella tenía más experiencia y pudo dominar la pelea.
-Ella es la madre del boxeo, todos crecimos mirándola. A mi me salió muy rápida de una semana a otra, reaccioné en el pesaje viéndola ahí a mi lado. No tuve mi mejor noche, quiero la revancha y seguro ella me la dará.
-¿En qué momento de tu carrera estás?
-Creo que es mi mejor momento, quiero ser campeona del mundo, estamos trabajando bien y lo hacemos en equipo.
-Siempre estuviste vinculada al deporte ¿Cómo terminaste en el boxeo?
-La gente nos conoce porque jugábamos futbol, pasé por el taekwondo y luego al kickboxing, y probé el boxeo. Hice 50 peleas amateur, en el 2014 pasé a ser profesional. No era conocida, en ese momento estaba radicada en Carlos Tejedor y gracias a Néstor Ferraro que me gestionó la licencia pude debutar como profesional.
-¿Imaginabas esta carrera tan rápido?
-No, lo hice para probar, era otra historia lo amateur otras peleas, otro vendaje hasta que empecé en lo profesional. No tenía promotores y quería pelear por el título argentino, conocí a Arano y me dieron la posibilidad de pelear por el título argentino y el sudamericano contra Soledad Mattyse.
-Hay un gran debate en la sociedad sobre los espacios de la mujer. No ha sido el boxeo un lugar en el que históricamente se le haya dado mucho lugar a las mujeres, aunque parece estar cambiando.
-Siempre predominan los varones. Nosotros ganamos menos y nos tienen menos en cuenta, eso sabemos que es así aunque hay muchas chicas que están peleando ahora. Esa diferencia en el deporte aún existe sobre todo en las ganancias y esperemos que cambie el día de mañana, estamos convencidas que eso se modificará.
–Estuviste radicada en Tejedor y Pehuajó. ¿Cómo estás ahora aquí en tu ciudad?
-Siempre extrañé Trenque Lauquen, venía todos los fines de semana. Soy muy familiera, siempre extrañé Trenque Lauquen y yo de acá no me quiero ir. Arano quiere que me radique en Junín, pero me voy a quedar acá, me siento cómoda y apoyada por la gente y mi equipo.
-Hoy sos una referente para las chicas con un movimiento incipiente del boxeo femenino.
-Hay muchas chicas jóvenes que quieren que dé clases de boxeo. Es un proyecto que estamos analizando, pero para hacerlo de manera recreativo y para chicas. Quizás en poco tiempo lo podamos hacer. Quiero transmitir lo que me enseñaron. Me gusta que las chicas me sigan y me vean como referente en este deporte.
-Antes vas a tener el cinturón de campeona mundial
-Claro, si. Yo le digo a Arano que cuando sea campeona del mundo voy a poner mi gimnasio, quiero que el boxeo me deje algo para el día de mañana, como un gimnasio.
-Sentís el reconocimiento de la gente
-La gente fue a mi festival y me gustó ese acompañamiento. Muchas veces no todos saben todo lo que uno hace. Yo tengo sponsors pero no tengo recursos para vivir definitivamente del deporte, tengo mi familia que me ayuda. Tengo que invertir en comidas, dietas, viajes, y un equipo grande que se reparte entre Trenque Lauquen, Tejedor y Nueve de Julio.
Mi día comienza a las 7 en el primer turno. Hacemos 3 turnos y más cerca de la pelea 2 turnos. Vivo entrenando, vivo para el boxeo, es como un trabajo cuando muchos se levantan a las 7 para ir a trabajar yo lo hago para ir a entrenar.
-¿Sentís que este es tu año?
-Si, lo siento. Quiero que me hagan una pelea en Trenque Lauquen para el título del mundo, están buscando un lugar más grande que el Polideportivo para una disputa mundialista, estamos convencidos que podemos hacer historia en Trenque Lauquen con un título del mundo.
Dice esas palabras y mira el enorme reloj en la pared que marca que este es su momento. Desde su interior tiene el convencimiento que los sueños están para hacerse realidad y quién puede decirle lo contrario a una mujer que a fuerza de peleas y golpes y contra toda la adversidad de un ambiente dominado por hombres y sin recursos económicos, logró colgarse las fajas de campeona nacional y sudamericana, y ahora está dispuesta a escribir su nombre con mayúsculas en la historia grande del deporte mundial. El tiempo es hoy.