El Pampa Calvo un ex futbolista multicampeón que es todo sencillez y humildad

El Pampa Calvo un ex futbolista multicampeón que es todo sencillez y humildad

A primera vista José María “Pampa” Calvo no parece un ex jugador de fútbol profesional multicampeón. No hay en él rasgos de divo ni excentricidade

A primera vista José María “Pampa” Calvo no parece un ex jugador de fútbol profesional multicampeón. No hay en él rasgos de divo ni excentricidades. Ni en sus ropas ni en sus palabras. Es un tipo más; de pueblo, de una humildad y sencillez abrumadora. Tanto, que muy probablemente camine la ciudad todos los días sin que nadie reconozca en él, a uno de los integrantes del plantel de Boca Juniors que se convirtieron en leyenda.
A los 41 años vive la paz y la tranquilidad de un pueblo del interior y el anonimato. Su carrera fue tan corta como gloriosa. Una lesión en la rodilla le impidió continuar en la alta competencia y se retiró a los 30 años de manera profesional, pero se volvió a su Quenumá (partido de Salliqueló) para jugar allí hasta retirarse. Ahora vive en Trenque Lauquen, y en una entrevista con FM Tiempo habló un poco de todo.
“Hace 8 años que estamos radicados aquí en Trenque Lauquen, mi ilusión siempre fue volverme luego de terminar mi carrera profesional porque me fui de muy chico a los 12 años. Cuando regresé conocí a mi señora y nos radicamos aquí. Me gusta volver siempre a Quenumá, tengo a mi padre allí, el fútbol porque voy cada 2 semanas a ver partidos, pero encontramos en Trenque Lauquen una ciudad linda, con posibilidades de educación para los chicos y estamos a una hora de Quenumá para volver en cualquier momento”.
Cuando el Pampa vivía en su pueblo, sus padres tenían una tienda. De muy chico mostró condiciones con la pelota y el sueño de jugar en Boca ya era un fuego interno difícil de contener.
“A los 12 años me fui a probar a Boca, en cada paso tuve la suerte de encontrarme con gente que me ayudó. Un verano me vio jugar Mario Pordomingo que era peluquero trabajando en Ituzangó que le cortaba el pelo a un entrenador de las inferiores de Boca y me consiguió la prueba”. A su corta edad ya había jugado 6 meses en Bahía Blanca y tenía cierta autonomía para manejarse por eso se quedó en la casa de otro compañero de las inferiores de Boca durante 3 años “siempre estaré agradecido a la familia Sierra” y luego pasó a la pensión Xeneize.
“Era chico pero muy independiente, fue difícil dejar la familia, de noche lloraba pero bueno, son cosas que hay que pasar. Tenia el objetivo claro. Como todo en la vida hay que pagar un precio, si el sueño es más grande se puede alcanzar a cumplir, el camino es espinado”.
Compartió pensión con otros jugares que fueron consagrados como Burdiso, Caballero, Marchan, “andábamos con el mango justo, mis padres me mandaban plata, el representante me daba plata. Recién a los 4 meses de jugar en primera pude alquilar un departamento y dejar la pensión”.
Su llegada a las categorías mayores llega justo con la era de gloria del Club. “Boca sale campeón en 1998 y empieza el recorrido, yo tenía 17 años. Al año siguiente hice la pretemporada con Córdoba, Bermudez, Samuel, Palermo, Riquelme, todos. Íbamos al vestuario y no hablábamos, ni nos sentábamos para no sacarle la silla a ninguno de ellos. Nos daban lugar si, con el tiempo se va sumando cada vez más la confianza. Me tocó ser suplente de Ibarra que fue uno de los mejores laterales del club, pero en el club siempre llegan jugadores no es fácil sostenerte y permanecer en Boca”.
En el año 2000 no viajó a Japón para la final con el Real Madrid “porque tenía solo 2 partidos en primera y no me llevaron” pero al año siguiente entró desde el banco para jugar contra Bayer Munich.
Es uno de los jugadores de Boca que más títulos tiene “mirando para atrás es increíble porque es muy difícil llegar y permanecer”.
-¿Cómo fue tu debut en la Bombonera?
-Mi debut pensé que era un sueño que estaba llorando, la noche anterior no dormí, a los 15 minutos cuando hay un tiro libre se para el partido y miro para todos lados y veo que estaba jugando. La mayor parte del tiempo estas muy concentrado en el partido, y no te distraes con el entorno.
-¿Cómo fue la experiencia europea cuando jugaste en España?
-Fue una experiencia muy linda vivir en Europa, tenia 26 años y quería mostrarme en la vidriera europea, fue una linda experiencia de vida y deportiva.
-¿Lo marcaste a Messi y Ronaldhino?
-Es una manera de decir (ríe). Mi debut fue en el Camp Nou a 10 días de haber llegado a España y en la primera jugada fui a una dividida con Ronaldhino y llegué tarde, le pegué con los tapones en el tobillo. Pensé que me expulsaban pero ni siquiera cobraron falta, él no protestó ni me dijo nada, un señor.
-¿Y con Messi?
-El jugaba por la izquierda entonces lo cruzaba poco, en la primera que me encaró por la derecha se la saqué y quedé con la cancha de frente (ríe), pero en la segunda me tiró un caño que no lo alcancé ni a ver. Perdimos 3 a 0.
Regresó a Boca en el 2008 y aparecieron los problemas en la rodilla. Se sometió a intervenciones quirúrgicas “pero fue muy difícil recuperar el cartílago”. Se retiró con 31 años.
En 2012 jugó en Argentino de Tres Lomas porque Quenumá no tenía fútbol y luego se fue su pueblo para jugar en Quenumasa. Además hizo el curso de DT para enseñar a los chicos “fue un sueño cumplido volver a jugar a mi pueblo”.
-¿Por qué no ejerces como DT?
-Hice el curso de técnico pero no dirijo porque quiero estar con mi familia, disfrutar de los fines de semana. Si entrenas y le pedís compromiso a los jugadores el primero que lo tiene que tener es el entrenador y si no estas dispuesto a hacerlo no lo hagas, por eso por el momento no lo hago.
-¿Cómo lo ves a Boca hoy?
-Está buscando recuperarse pero no es fácil encontrar un funcionamiento y el fútbol argentino es difícil, le faltan algunas variantes.
-¿Ser parte de un equipo multicampeón te hace sentir invencible?
-En ese momento teníamos mucha confianza con una mentalidad muy ganadora, Bianchi nos decía que una victoria te lleva a otra victoria y que hay que acostumbrarse a ganar. Se formó una mentalidad muy ganadora que ellos habían iniciado en 1998, desde chico en Boca mamás eso la mentailidad ganadora.
-¿Realmente era una persona tan importante Bianchi como lo describen?
-Bianchi sabia los momentos de cada jugador, era un líder y eso es lo más difícil porque son muchos en un plantel, y era creíble para nosotros porque lo que nos decía después se veía reflejado, te pedía trabajo y te daba la oportunidad. Nos daba lugar a los chicos que salíamos del club, para mi carrera fue determinante por su manejo de grupo, se preocupaba más por los que no jugaba. El grupo es fundamental.
Dijo que aún tiene relación con los jugadores de aquellos años y que no está dispuesto a sumarse al equipo de trabajo en el Club porque no quiere vivir en CABA.
-Saliste de un pueblo chico, te separaste de tu familia a los 12 años y ganaste todo ¿qué mensaje le das a los pibes que sueñan ser futbolistas?
-El mensaje es que se puede, hay que jugar bien pero además hay cientos de detalles como el cuidado, la personalidad, si pueden adquirir eso para la vida, con pasión y ganas, van a estar mucho más cerca de lograr los sueños. A veces hay que pagar un precio, estar lejos, la familia, el que está dispuesto a eso, si el sueño es más grande que lo que se pierde, se puede lograr. Pero primero a los chicos les digo que estudien y luego si a los 17 años ves que podés jugar, que estás cerca, entonces ponele más pilas. Pero para un pibe de 12 años lo importante es estudiar y luego si puede cumplir el sueño bienvenido sea.