Fabián Luna pertenece al selecto grupo de aquellos capaces de hacer bien cualquier deporte. Hace ya 13 años que colgó los botines tras una exitosa c
Fabián Luna pertenece al selecto grupo de aquellos capaces de hacer bien cualquier deporte. Hace ya 13 años que colgó los botines tras una exitosa carrera futbolística, y ahora se embarcó en la nueva onda del mountain bike donde deja todo en cada pedaleada como cuando hacía esos cruces futboleros, y como si fuera poco sorprendió días pasados ganando su cuarto torneo de bochas. Se puede decir que es un jugador de toda la cancha.
A los 53 años, el crack del fútbol doméstico repasó para FM Tiempo su vida, que en gran parte gira en la órbita de una pelota, y se abre el señalar que si bien el fútbol es su vida también le sacó mucho de ella, porque resignó cosas para poder estar siempre listo para jugar.
Al igual que el Bocha Bochini, Luna extendió una carrera futbolística por 25 años vistiendo siempre una sola camiseta: la celeste la de Barrio Alegre, club al que también dirigió y hasta nuestros días sigue alistado como colaborador institucional, aunque en algún tramo de la charla admite que nadie es profeta en su tierra y que a veces siente más reconocimiento afuera que dentro del camping Celeste.
“Me quedó la materia pendiente de haber podido llegar al fútbol profesional, pero bueno, si no se pudo por algo habrá sido y siempre tratamos de dar todo lo posible acá” dice en el comienzo Luna que viajó dos veces a Argentinos Juniors y una a River Plate y aunque le sobraban condiciones las cosas no siempre salen como uno espera. “Eran otros tiempos, las puertas no se abrían tan fácil y tenía que viajar a dedo para ir a probarme”.
Si bien su nombre y apellido está muy vinculado con nuestro pueblo, es originario de Tres Algarrobos. Hijo de un policía, sufrió los traslados de chico, por eso llegó a Beruti con 8 años y poco tiempo después su familia se instaló aquí “atrás de la vía” cerca del Club donde creció.
Hizo inferiores como lateral izquierdo y en primera debutó como volante central, hasta que Omar Genarini se cruzó en su camino “era un adelantado en su tiempo” recuerda y fue él quien lo convirtió en segundo marcador central.
Jugó 17 torneos del interior para distintos equipos y se retiró con 40 años en el año 2010. Siempre estuvo vinculado como colaborador pero el año pasado –dijo- le dedicó mucho tiempo y este año intenta dedicarse más a su nueva pasión la bicicleta.
“Quiero agarrar el mountain un poco más en serio porque los fines de semana no podía viajar ni anotarme en ninguna carrera. Tengo artrosis en la rodilla izquierda y ya no disfrutaba el jugar el súper senior me costó mucho aprender a decir que no porque iba a todos los partidos que me invitaban, lo pude soltar. Trato de no ir a ver el senior porque sé que es más fuerte que yo” dice y se ríe.
A la bici llegó también de la mano de ex compañeros de Barrio Alegre “se armó un grupo lindo y nos hace bien. Compito en bicicleta y ando entreverado, lo hago para sentirme bien y soy competitivo por naturaleza aunque no me desespero es un deporte individual donde uno busca competir consigo mismo”, pero también le da a las bochas “todo empezó por un amigo, el Fofi Larroque que dice que es mi mentor (ríe) me llevó a Sarmiento y luego empecé a jugar” ya ganó 4 torneos.
“Me gusta tomarme las cosas en serio. En el fútbol me enojaba con todos y me puteaba a todos, me transformaba dentro de la cancha, cuando llegaba me decía a mi mismo no tengo que ser tan insoportable en la cancha pero no podía, jaja, no lo disfrutaba siempre me terminaba enojando”.
-¿Sentís reconocimiento de la gente?
-Sí, por suerte sí donde he tenido la posibilidad de ir a los clubes de acá, me reconocen en el buen sentido, saben lo que di para el fútbol y me reconocen. Y afuera también, hay varios lugares que cuando se me nombra me reconocen. Hay otros que, bueno, por ahí yo siempre pido que se me reconozca más en mi club, siempre lo charlamos, yo digo me reconoce más en otros clubes que en mi club, y bueno, eso por ahí…
-¿Qué te gustaría que pasara?
-Que sea más reconocido, que no pretendo nada de otro mundo, sino que por lo menos sepan quién fue Fabián Luna lo que dio para la camiseta celeste, no tuve partido homenaje por ejemplo. En su momento me lo quisieron hacer, pero gente de afuera, y no quise porque para mi debía ser del club. Pero bueno, son cosas que ya pasaron ahora a mirar para adelante.
-Viste que nunca nadie es profeta en su tierra.
-A veces pasa. A veces pasa.
-Y ¿qué es para vos el fútbol?
-Y para mí el fútbol fue parte de mi vida. Fue parte de mi vida. Yo me despertaba respirando fútbol y me acostaba respirando fútbol. Vivía para el fútbol. Era locura que tenía, siempre, siempre. He dejado varias cosas de lado por ir a jugar un partido. He dejado varias cosas, he vendido hasta viajes para irme en familia, de viajes de vacaciones. Lo vendía porque a lo mejor no podía jugar el domingo con un torneo del interior. He hecho varias cosas que no. Para mí fue mucho el fútbol. Por supuesto que la familia siempre uno la tiene presente, pero creo que perdí cosas con el fútbol. Perdí cosas como gané, pero me sacó mucho tiempo de mi vida. A mí me gustaba entrenar. Nunca tuve lesiones. He jugado desgarrado, he hecho cosas que ahora no haría.
En otro tramo de la entrevista dijo que parte de su carrera exitosa se la debe a “compartir equipos con buenos jugadores y eso me hizo las cosas más fáciles” en Trenque Lauquen jugó los regionales o torneos del interior además de Barrio Alegre, para Monumental, Atlético, Ferro y FBCA.