La producción del primer trimestre se cerró con una caída significativa del 15% sobre 2023. Y el OCLA asume que seguirá debajo, achicando la bre
La producción del primer trimestre se cerró con una caída significativa del 15% sobre 2023. Y el OCLA asume que seguirá debajo, achicando la brecha hasta junio, cuando comenzaría la recuperación.
Es que, a la mejora de la base forrajera y mayor stock de reservas, se suman ahora relaciones de precios favorables a la leche frente al maíz y la soja; que no se expresan aún en plenitud, por la menor cantidad de vacas (estacionalidad y sobre venta de animales el año pasado) y el problema financiero, que arrastran aún muchos tambos.
Ese fue el informe del Panorama Lechero que mensualmente distribuye la CAPROLECOBA a periodistas de la zona.
En otro párrafo se refirieron a los precios: “Hay tensión en el mercado: el índice de precio de la leche de tambo sigue por debajo del índice de costo, en los mismos. Y del otro lado, pierde atractivo el negocio externo y se debe apuntar más a un cliente interno disminuido.
Los tamberos necesitamos subir la temperatura de nuestro negocio, para salir definitivamente de una prolongada hipotermia. Las industrias tratan a su vez de evitar que les suba la fiebre. Algunas veces, hay que pagar precios con más esfuerzo que otras, para mantener el barco a flote”.