El plomero gasista de Trenque Lauquen que cambió los guantes por el manubrio y ahora compite en pista y ruta
Marcos Escudero tiene 34 años, es padre de dos niñas y trabaja como plomero gasista por cuenta propia en Trenque Lauquen. Su historia deportiva podría ser la de cualquier vecino de la ciudad, pero tiene un condimento especial: hace dos años y medio cambió radicalmente de disciplina y hoy se encuentra liderando el campeonato 6 ciudades de ciclismo en la categoría menores de 40 años.
«Arranqué porque estaba así medio gordito», confesó Escudero durante una entrevista en FM Tiempo. «Digo, bueno, vamos a hacer bici o algo. Y me enganché y me fui metiendo y ahora no lo puedo dejar.»
Antes del ciclismo, Marcos tenía una historia en el boxeo. «Es uno de mis deportes favoritos, lo hacía de chico y siempre me gustó», explicó, mientras mostraba un tatuaje de guantes de boxeo que lleva al cuello. Incluso tuvo algunas peleas amateur, donde «anduve bien», según sus palabras.
Sin embargo, la paternidad cambió su perspectiva. «Cuando tuve las nenas mías, pensaba en lo diferente, no quería andar lastimado por ahí», reflexionó sobre el cambio de disciplina.
EL SALTO AL CICLISMO DE ÉLITE
Lo que comenzó como una forma de ponerse en forma se transformó rápidamente en una pasión competitiva. Escudero empezó en mountain bike, pero pronto descubrió la pista y la ruta.
«Me gustó el ciclismo, entonces cambié el mountain bike por lo que es ruta y pista», explicó. «Es otra cosa. Tiene otro escondimiento, tiene que usar más la cabeza que las piernas, tiene que ser más inteligente, más estrategia”.
Actualmente compite en ambas modalidades y los resultados lo avalan: lidera el campeonato 6 ciudades, quedó tercero en el campeonato de ruta en Toay La Pampa el año pasado, y también participa en duatlón junto a una compañera, donde van segundos en el campeonato.
La rutina de Escudero es la de un verdadero atleta. «Salgo casi siempre después del mediodía, hacemos hora y media, dos horas», describe su entrenamiento diario. Como trabaja por cuenta propia, puede manejar sus horarios.
Los entrenamientos incluyen trabajo en pista, acceso Rodríguez Mera y Perón, junto a un grupo de unos 10 ciclistas locales. Además, tiene el privilegio de entrenar con el reconocido Javier Lobosco y su equipo. «Son gente de muchísimo prestigio en el ciclismo. Muy agradecido, siempre le agradezco», valoró.
El ciclismo de competición requiere inversión. Escudero tiene tres bicicletas: una para pista, otra para ruta y una tercera para mountain bike. Los viajes a las competencias salen «todo del bolsillo de uno», y por eso se organiza con compañeros para «solventar los gastos entre tres».
«Es un deporte caro, la verdad que sí, re caro es, todo», admitió, pero agregó: «Mientras se pueda lo hacemos».
MIRANDO HACIA ADELANTE
Con el liderazgo en el campeonato 6 ciudades prácticamente asegurado («quedan dos fechas más y se termina»), Escudero ya piensa en el futuro. «Si ganamos este campeonato, ya te pasan a otra categoría. El año que viene vamos a buscar poder avanzar más, porque si no siempre te estancás”.
Su objetivo es claro: competir en la categoría élite o máster, «vamos a buscar otro nivel ya», siempre enfocado en su disciplina preferida: «Siempre pensando en la pista».
