Campeones de la vida

Campeones de la vida

Campeones de la vida fue una serie televisiva de finales de los ’90 y principios de 2000. Un culebrón que le permitió a la TV hacer una metáfora con a

Campeones de la vida fue una serie televisiva de finales de los ’90 y principios de 2000. Un culebrón que le permitió a la TV hacer una metáfora con aquellos años duros que nos tocaba afrontar como país y lo que la clase trabajadora hacía todos los días: lucharla, pelearla. En su trama, en la que perduraba una historia de amor, subyacía el mundo del boxeo, un deporte muy arraigado en los argentinos, practicado por deportistas que generalmente pertenecen a clases sociales más bajas y que se hacen camino a fuerza de sacrificio y actitud.

El país y su relación con las crisis continúa su ciclo, y el boxeo sigue siendo un deporte muy popular aunque cada vez tiene más adeptos, ahora de distintas clases sociales. En la región, se desarrolla la Liga de las Estrellas, un torneo amateur que permite reunir a los boxeadores de la zona en festivales que van rotando de sede. También en Rivadavia, hay una fuerte movida con encuentros frecuentes.

La excusa entonces está servida. Vamos a escribir sobre boxeo, y la cita es Pellegrini el 14 de septiembre en el Polideportivo Municipal. Hay humo y olor a chori, hay 9 peleas programadas, hay mucha gente, música de fondo y todo pinta para la noche perfecta. Si hasta compartimos la primera fila de las butacas con el mismísimo intendente pellegrinense, Guillermo Pacheco, que se queda toda la noche para ver la estrella local Alexis Gómez, el plato fuerte de la velada boxística.

El organizador del evento es “Tito” Frank un boxeador amateur a punto de dar su salto al profesionalismo. “La Liga de las Estrellas nos permite mostrar a todos los boxeadores de la zona, hacemos acuerdos con los Municipios para contar con un lugar como el Polideportivo de Pellegrini y organizamos la noche”, dice Frank, de campera y gorra azul con la visera hacia atrás.

La música suena fuerte en la noche, aún la espera se prolonga a la espera de más público y seguimos con las notas.

El árbitro de la noche es José Alfredo Angulo, es conocido cantante de tango de Trenque Lauquen, y un apasionado por el box. Hace unos años condujo un programa de TV sobre este deporte y ahora comparte el cuadrilátero con los deportistas. De impecable camisa blanca y moño negro, Angulo dice: “Ser árbitro es algo lindo que lo descubrí de grande. Tenés la posibilidad de ver la pelea muy de cerca y poder trabajar con dos boxeadores que están dando lo mejor de ellos y vos sos un poco el que impartís las reglas y tratás de hacer justicia entre los dos contendientes”. La clave de esa profesión dice “es respetar la integridad física de los boxeadores porque son chicos amateur y jóvenes y hay que cuidarlos”. El deporte no es violento “hay  estilo, estrategia, y mucho entrenamiento. Si no estás bien entrenado no se puede subir a un ring”.

Los actores

Los actores de la noche son los boxeadores. Pelean por “la bolsa”, cobran dinero por round y se les pagan los viáticos. No es mucho dinero el que recaudan en una noche, pero lo hacen por el placer de practicar este deporte que requiere de una preparación muy silenciosa y solitaria para poder demostrar en una noche todo lo que tienen para dar.

Uno de los que viene en ascenso es el trenquelauquense Fernando Sayago. Un albañil de 30 años, que hace 6 comenzó a practicar este deporte con la intención de bajar peso. Hoy tiene más de 30 peleas y está a la espera de su debut como profesional. A fuerza de sacrificio y mucho trabajo se fue ganando un lugar en la escena boxística, ya tiene un nombre registrado, una escuela de boxeo en el Club Sarmiento junto a su hermano Diego y será parte de las peleas preliminares de la gran noche de la Laura “La Joya” Griffa en el Polideportivo.

“La vida del boxeador es sacrificada sobre todo si lo haces todo a pulmón” dice Fernando Sayago. “La verdad es que acá tenés que hacer dietas, pasás malos momentos cuando estás bien entrenado y no se te dan los resultados; es todo muy psicológico tenés que tener mucha voluntad es cuestión de entrenar y tomar todo como un  aprendizaje”. Sayago tiene su trabajo en la construcción, a la tarde hace trabajos físicos y a la noche bolsa y rutinas boxísticas, todos los días, “todo a pulmón no cualquiera lo hace. Cuando arranqué en esto no pensé que iba a hacer una pelea y ya llevo más de 30 peleas, mi sueño es ser profesional y cuando sea profesional buscaré otro sueño más, vamos paso a paso”.

La estrella de la noche es Alexis Gómez, un púgil pellegrinense, el crédito de la ciudad y la gente pagó la entregada para verlo. “Soy de Pellegrini aunque actualmente estoy entrenando en  Florencio Varela. De chico practiqué taekwondo y después entré a un gimnasio para bajar kilos y llegué al boxeo sin querer, empecé con triunfos y triunfos y bueno acá estoy con 50 peleas amateur, estoy cerca de ser profesional pero como trabajo no me dan los tiempos pero venimos en camino. El deporte es sacrificado, la dieta, el entrenamiento, la parte psicológica. Mi sueño es triunfar y dar lo mejor de mi, siempre llegar a una meta, tanto en la vida como en el deporte”.

 

 

 

 

 

Marcelo Rosas tiene 29 años, es de Trenque Lauquen, es profesor de King boxin en la escuela PFC pero practica también boxeo. Está en Pellegrini para una exhibición que dará en el comienzo de la noche. “La vida del boxeador es sacrificada, los deportes de contactos son sacrificados, la gente se piensa que es sólo subirse y pegar, pero no es así, es entrenar hacer dietas cuidarse, la ayuda de la familia, los compañeros”.

Uno que recién empieza es Román Moras, también de Trenque Lauquen, de la Escuela “La vida en un puño”. Dice que abrazó el box por una película de Rocky. Tiene 17 años y para subir al ring necesita el consentimiento de su padre, que camina de un lado a otro cuando el nene compite. “Tengo 4 peleas, la vida del boxeador es sacrificada, a veces te bajoneás cuando no te salen los resultados”. Aún cursa la escuela secundaria y dice que no hay violencia en el boxeo “no es tan violento como se ve, te van a pegar, eso sí, pero vos no te tenés que dejar que te peguen”.

Federico Ram es árbitro de box pero es también uno de los promotores de la Comisión de Box. En 2016 presentó una ordenanza, “la idea era regular la actividad porque no había nada”, fue designado como presidente de la Comisión de Boxeo (actualmente es delegado) se dieron cursos de entrenador y de arbitraje. “Hicimos fuerte el área de capacitación que es lo que faltaba”. También presentó un proyecto para crear una escuela de boxeo.  “En concreto los objetivos planteados se vienen cumpliendo”.

El Intendente, en el público

Guillermo Pacheco, intendente de Pellegrini está en la primera fila para ver el festival. “No es de las disciplinas que más me gustan pero  una propuesta de este tipo no podía faltar para acompañar a algún boxeador local para mi es una satisfacción que se pueda desarrollar en neustra ciudad”.

Dijo que en la Municipalidad siempre analizan iniciar un taller de boxeo para contener chicos “no solamente por desarrollar la actividad si no también le aporta mucho desde lo social aportando un cambio de conducta”.