Encrucijada de la interna radical: Alianza con Milei o reconstruir nuestra identidad

Encrucijada de la interna radical: Alianza con Milei o reconstruir nuestra identidad

Nota de opinión de Hernán Tojo Militante radical Actualmente como joven militante me siento representado sólo por jóvenes militantes, pero al ac

Nota de opinión de Hernán Tojo
Militante radical

Actualmente como joven militante me siento representado sólo por jóvenes militantes, pero al aceptar conscientemente la necesaria pertenencia a un partido para hacer política en serio, me veo obligado a elegir. No podemos seguir tomando malas decisiones, las últimas gestiones de la UCR provincia hicieron que no tengamos candidatos a Gobernador, acordaron para que tampoco haya un radical como opción presidencial en las PASO, no soy optimista para el futuro si los mismos que tomaron esas iniciativas siguen gobernándolo.
No existe el radicalómetro, existen personas que creen en los mecanismos democráticos del partido para crecer. Estos mecanismos le permiten a los partidos políticos no errarle tanto, intentar interpretar la sociedad y adaptarnos a los cambios rápidamente, pero si estos mecanismos dejan de funcionar, inmediatamente nos perdemos. Un ejemplo claro fue cuando se suspendió en 2011 en Artículo 209 de la carta orgánica provincial:
“ARTÍCULO 209°: Será incompatible el desempeño simultáneo de cargos partidarios nacionales, provinciales, seccionales y/o de distrito con representaciones electivas nacionales, provinciales y/o municipales en forma indistinta”.
Este artículo no es caprichoso, da a las claras la vocación de que los dirigentes de la UCR deben ser el primer organismo de control de sus representantes, quienes solo representan los intereses partidarios y no a la inversa. Definitivamente lo debemos volver a enaltecer.
Las diferencias ideológicas pueden convivir mientras tanto respetemos estos mecanismos, de la misma forma que en democracia coexisten, se respeta las minorías y se equilibran los poderes, por eso existen procesos de internas que desde mi punto de vista fortalecen, ordenan, y dinamizan los espacios de poder.
Plantear que Miguel Fernández es un eximio militante radical es falso, sabemos que cuando tuvo que abrir un local paralelo lo hizo, ganó por fuera del partido orgánico y en su primera gestión fue escasa la participación tanto de jóvenes como de referentes propuestos por el partido, obviamente estaba en su derecho, pero demuestra cierto desapego a los dispositivos partidarios que garantizan mejores gobiernos al final del camino. Después, jóvenes del partido lo acercaron y supo representar a los intendentes radicales en la provincia, acompañados por esa nueva generación comprometida y que sí detentan un verdadero sentido de pertenencia a la UCR.
Dicho esto, ahora Miguel Fernández tiene la posibilidad de ejercer un cargo que le permita demostrar que está a la altura del partido que lo bancó en sus 2 gestiones sin recibir muchos gestos de su parte.
La interna pone sobre la mesa una discusión de fondo, por un lado están los que dejan la puerta abierta a una alianza con LLA (Milei), algo que desde mi lugar creo que es seguir atentando contra nuestro partido y sobre todo contra el pueblo, que necesita una voz confiable que ponga freno al avance de ciertas políticas recicladas de una etapa nefasta para nuestro país, y por el otro lado enfocarnos en construir una alternativa propia, como se quiso hacer con Facundo Manes en el 2023.
Quizás a algunos políticos la realidad los apura, necesitan mantener sus cargos y generar alianzas efectivas donde mantenerse vivos, yo apuesto por mirar más lejos y garantizar cierto futuro, con sensatez para los militantes que alguna vez interpretaron el partido como una fuerza de carácter popular, de políticos despojados de individualismo, capaces de dejar de lado intereses personales y ponderar los del resto, sobre todo los que más necesitan ser representados, la verdadera “causa de los desposeídos”.
Llamamos a los afiliados a reflexionar, cada elección es una oportunidad para que los que nos identificamos con el radicalismo pongamos un freno, en este caso a la estrategia de alianzas que profundizan la decadencia ideológica del partido, yo no me conformo con tener dirigentes sospechados de corrupción maquillando sus listas con gente honesta, víctimas de un aparato político que no supo estar a la altura estos últimos años. Decido acompañar a la lista que integra Pablo Juliano, referente de mi generación y quien sí está dispuesto a plantear esta discusión y sobre todo llevar a cabo el cambio que necesitamos.