Historias de Malvinas: a 41 años la carta de Lito Abregú

Historias de Malvinas: a 41 años la carta de Lito Abregú

Hoy 8 de marzo de 2022 es una fecha importante para mi. Un día como hoy a las 8:30 hs., del año 1982, me llevaban a ser parte del Ejército Argentino.

Hoy 8 de marzo de 2022 es una fecha importante para mi. Un día como hoy a las 8:30 hs., del año 1982, me llevaban a ser parte del Ejército Argentino. Me incorporaron para hacer lo que se denominaba «la COLIMBA» ( Corre, Limpia y Barre). Mis padres me acompañaron al distrito Militar de barrio Marina del Partido de la Matanza, Provincia de Buenos Aires, donde ingrese, yo mirando para atrás, despedí a mis padres y a mí familia.
Éramos muchos chicos. Yo tenía solo 18 años, estaba cursando mi último año de secundaria, en horario nocturno, en el Colegio Comercial Juan Bautista del Lasalle, de Ramos Mejía, Partido de la Matanza. ¡Nunca me imaginé que iba a ser un soldado clase de guerra!. En ese momento se llamaba Servicio Militar Obligatorio. Nuestro país estaba bajo el gobierno Militar, al mando como presidente, se encontraba el General Fortunato Galtieri.
Por aquellos años, sólo quería terminar mi escuela secundaria.
Lo primero que me hicieron a mi, y al resto de los chicos que estábamos en el distrito militar fue: pelarnos, es decir, raparnos la cabeza a todos los soldados, me costó reconocer a los compañeros que tenía al lado una hora antes, eso fue un momento que me impactó mucho.
Nos llevaron a hacer instrucción a la localidad de Campo de Mayo. Luego fui destinado al Batallón de Arsenales 101 de Villa Martelli. Durante la instrucción, que era supuestamente para formarnos como soldados, en solo 45 días, escuchaba a mis superiores que decían » estamos ganando!…» otros decían » estamos perdiendo!», Yo, que era jugador de futbol, en esos años jugaba en el club Almirate Brown, creo que en la 4ta división!, pensaba que, de lo que estaban hablando, era de algún partido de la selección Argentina!!, pues ese año, 1982, se jugaba el Mundial de España, pero no…¡estabamos en guerra!
De repente, y antes de terminar el tiempo de instrucción como soldados, que nos habían dicho que era de 45 días, se interrumpió!, y a los 30 días nos hicieron levantar campamento y nos llevaron al cuartel y nos acuartelaron. Recuerdo que mientras volvíamos arriba de los camiones del ejército, ( llamados Unimoc) , por la avenida Panamericana , la gente salía a la calle a saludarnos con banderas argentinas, yo seguía pensando que era una cuestión del mundial de futbol, ¡jamás me imagine que estábamos en guerra !,y ¡menos con Inglaterra!. Ya en el cuartel, el jefe del cuartel, nos hizo formar a todos y nos confirmó la noticia.: ¡¡¡estamos en guerra!!!
Cuando salí en mi primer día de franco nos dieron un código, o una manera de acuartelarnos, el mismo consistía en que si me llamaban a mí, yo tenía que llamar a otro compañero y todos teníamos que volver en forma inmediata al cuartel. También recuerdo, que hacíamos simulacro de ataque de guerra porque se comentaba que los ingleses podían atacar Buenos Aires!. Nuestra companía era una unidad de apoyo, estábamos para llevar armas, municiones, armamento en un avión, llamado Hércules, de color verde militar, muy grande y después regresaba al mismo lugar del que salíamos.
Hoy pienso que mi familia sufría mucho, pero toda la gente estaba feliz por lo que se había logrado como país. Yo no entendía mucho. Solo hacía caso a las órdenes que me daban mis superiores.
Dentro del Batallón fui destinado a la sala de armas. Allí, a veces, nos daban buena comida, como milanesa con puré o fideos con estofado y decían que si queríamos repetir, algunos repetían… y de repente,… ¡nos sacaban haciendo salto rana! , ¡nos hacían correr!, hasta que algunos vomitaban la comida.
Aprendí a desarmar un fusil que se llamaba FAL (fusíl automático liviano), o la denominada MAC que era una ametralladora automática. A veces caminábamos por el cuartel y nadie nos decía nada. Todo era incertidumbre. Yo no podía dormir bien, creo que ninguno de mis compañeros podíamos dormir.
Un día estábamos en la companía comando, todos formados, preparados con el bolsón porta equipo y un FAL, porque venía a pasar revista el teniente coronel de la companía que no sé cómo se llamaba. Pasaba por el medio de la companía y decía:- » Ud! un paso al frente!…seguía y repetía lo mismo:- «Ud!, un paso al frente!». Paso por al lado mío y le dijo a un compañero que estaba junto a mi:- «Ud!, un paso al frente!». Con el tiempo me entere que todos los elegidos por él se iban para las Islas Malvinas a pelear en forma directa porque faltaban soldados, hoy creo que tuve un Dios aparte, porque sino, no podría estar escribiendo todo esto. Con el tiempo comprendí que si la guerra seguía, seguro que todos los que estábamos en esa companía íbamos a la guerra. Al compañero que habían elegido y que dormía al lado de mi cama, no lo vi más, nunca supe si volvió o no. Paso el tiempo, terminó la guerra, nos rendimos, muchos soldados Argentinos e Ingleses murieron.
Al tiempo hubo una baja de honor por ser clase de guerra, que se hacía por sorteo, había una fila larga y todos los sodados metiamos una mano en una bolsa y sacaban un nombre y ese que salía se iba de baja. Uno de mis compañeros saco mi nombre y me fuí de baja.
Siempre busqué a mi compañero de carpa donde dormíamos en la instrucción, se llama Marcelo Costa. Nunca lo encontré. Una vez que me fui de baja, volví al colegio secundario, terminé. Ingrese a la Universidad Nacional de Buenos Aires, Facultas de Derecho. Me casé, tuve dos hijos hermosos, ingresé a trabajar de cafetero a la Comisión Nacional de Energia Atómica trabaje 8 años, lugar donde trabajaba mi padre. En 1992 ingreso al Poder Judicial de la Provincia de Buenos aires, este año cumplo 30 años de trayectoria. en 1996 me recibo de abogado. Muy poco les conté a mis hijos de esto. Y salí de baja de la colimba y me puse a estudiar, a formar mi familia, a tener un futuro como borrando lo vivido. Jamás fui a un centro de veterano de guerra, Todos estos años vi como mis compañeros tenian que pedir limosna para vivir, subsidios, un sueldo , etc muchos se suicidaron y otros no sé qué fue de su vida. Quizás por eso me encerré en mi no hables más de esto y me dediqué a estudiar, trabajar, formar una familia y criar a mis hijos…En el año 2018, me caso por segunda vez.
Gracias a mi mujer Ainoa , este año fui de vacaciones y pasé por comodoro Rivadavia, pasamos por la IX Brigada Aérea de Comodoro Rivadavia, bajé conocer donde el avión Hércules que salía desde Buenos Aires traía las armas que cargábamos. No aguanté tanta emoción y me puse a llorar como un niño!. No sé qué me pasó…, quizás fue que me recibieron en la guarda del cuartel unos soldados que estaban haciendo guardia, y cuando comencé a contar mi historia, me largué a llorar mucho y con mucha angustia como NUNCA lo hice. Cuando me fuí, los soldados que estaban ahí, se sacaron una foto conmigo.
Hoy, en el cuartel donde yo estaba, está construido Tecnopolis., que es un espacio cultural del Gobierno. Cada vez que paso por ahí me trae muchos recuerdos. Hasta acá puedo contar lo que viví en ésa época donde nuestro país estaba en guerra, lo demás me lo guardo para mi, creo que va morir conmigo. Yo escribo esto porque necesito contarlo. Necesito que mi nieto que hoy tiene casi dos años, sepa que hizo su abuelo en la guerra de las Malvinas. Me hace bien largar todo lo que tengo adentro. A veces pienso que hubiese pasado si el jefe de la companía me apuntaba a mi y me decía:- «Ud!, un paso al frente!». No les puedo mentir , mientras escribo esto, se me cae alguna lágrima y me transpiran mis manos, esas manos que alguna vez tuvo un fusil para defender a nuestro pais.
Después de 40 años, solo me quedan fotos que guardaron mis padres y mi deseo es conseguir un «certificado del ejercito de haber sido soldado en esa época». también, algún día, poder «viajar para conocer nuestras Islas Malvinas».
Gracias a todos los que se detuvieron a leer esto. Y no se olviden «las Malvinas fueron , son y seran ARGENTINAS. ¡¡VIVA LA PATRIA!!.-»
Rómulo Rubén Abregú. Clase 1963
Soldado del Batallón de Arsenales 101
Villa Martelli Pcia de Buenos Aires
Argentina.-
Marzo 2022.-