El intendente municipal, Miguel Fernández, habló ayer sobre las obras en las escuelas y la imposibilidad que se pueda dictar clases en varios edifici
El intendente municipal, Miguel Fernández, habló ayer sobre las obras en las escuelas y la imposibilidad que se pueda dictar clases en varios edificios. Dijo que la Comuna trabaja a contrareloj para terminar los trabajos y negó que las demoras fueran por causa del envío de dinero de la Provincia sino que la atribuyó a los procesos administrativos y a la pandemia. Pidió ser más empáticos y aceptar el ofrecimiento de la Rural y los clubes para mudar las aulas.
Entrevistado en Canal 12, el mandatario recordó que se trata de un plan de obras de cubiertas y sanitarios para las escuelas 35; 2; ENET; Colegios Secundarios y en 30 de Agosto el CEF. “Son 3 actas por 25 millones de pesos pero había que dar una serie de pasos administrativos que a veces son más lentos que lo que uno quiere” dijo.
“Estas obras surgen luego del relevamiento realizado en 2020 por el área de arquitectura de la provincia. Estuvo navidad y año nuevo, el intendente estuvo en aislamiento la arquitecta cayó con positivo, se hicieron las ofertas de obras por disponibilidad de tiempo y con todo eso se decide quién hará las obras, se inició el proceso de compra de materiales y empezaron las obras”.
Siguió: “Esta obra la financia la municipalidad con recursos propios en la certeza que la provincia hará los pagos cuando se vaya rindiendo, estamos haciendo el esfuerzo para que las aulas estén disponibles y en condiciones. Hay una cuestión paradojal porque todos hemos ofrecido alternativas para que con un poco más de flexibilidad podamos facilitar el proceso, como baños químicos o contenedores, pero no es una decisión que tome el intendente yo hago todo el esfuerzo posible para que se inicien las clases con las particularidades de la pandemia en el menor plazo posible”.
“Estas obras fueron planteadas como reparadoras, pero cuando recorrimos las escuelas vimos que había otras obras que hacer, decidimos hacer las obras bien y que queden definitivas y no tener que hacerlas otra vez el año que viene. El monto de dinero no alcanza, lo hablé con la ministra y me dijo que no había problemas”. Y cerró: “Todos tenemos que ser más flexibles y empáticos con lo que pasa a cada uno, tenemos que empujar el carro para el mismo lado, los chicos tienen que volver a clases, los docentes tienen que tener seguridad, hubo ofrecimientos de la rural y de algunos clubes para dar clases ahí hasta que se terminen las obras. No es lo normal, las clases se dan en las escuelas pero no estamos en ese mundo en el que querríamos estar”, concluyó.