Un golpe silencioso y certero en la madrugada. Así se llevaron bebidas, mercadería y una computadora de una almacén de barrio en el sector Este de la ciudad. Entraron por el frente, forzaron la puerta principal. Nadie vio ni escuchó nada, pero la Policía según pudo saber OESTE BA, trabaja sobre algunas pistas y huellas en el lugar.
La sorpresa para los propietarios de la despensa Rucci de Presiente Uriburu y Mollard llegó en las primeras horas de la mañana, cuando unos vecinos alertaron sobre la puerta abierta y algunos artículos esparcidos en el suelo, producto de la huída de quien, o quienes cometieron el hecho.
Se robaron bebidas alcohólicas, alimentos y golosinas, y la computadora del lugar. El atraco fue osado, dicen algunos vecinos, porque los autores forzaron y rompieron la puerta principal con dos pasadores y un candado, en una esquina que suele tener mucho tránsito, un riesgo demasiado alto. Ahora los investigadores colectan pruebas para dar con los autores del hecho.
Los damnificados realizaban hoy a la mañana los trámites administrativos para la causa que se abrirá sobre el hecho. Se trata de una familia joven, emprendedores que llegaron hace menos de un año a ese barrio, alquilaron un local desde el que abastecen alimentos para los vecinos en una despensa que abre de lunes a lunes y hasta que las velas no arden. Son comerciantes de muchas horas de trabajo, como todos en estos tiempos de vacas flacas, que ponen el cuerpo para que rindan las ventas. Será un duro golpe para la economía doméstica, del que deberán reponerse.