Una nueva presentación del Coro Mester

Una nueva presentación del Coro Mester

En la noche del sábado 5 de noviembre de 2022 se concretó una cita largamente postergada, que debió tener lugar a principios de 2020 pero no pudo ser

En la noche del sábado 5 de noviembre de 2022 se concretó una cita largamente postergada, que debió tener lugar a principios de 2020 pero no pudo ser por la pandemia: la congregación de la Iglesia Evangélica Menonita había invitado al Coro Mester de Juglaría para actuar en el Templo de Belgrano y Alsina. Más de dos años y medio después, se cumplieron todas las expectativas con un concierto que motivó aplausos calurosos luego de cada obra interpretada por los “cantores con oficio” (parafraseando el significado del nombre de la agrupación, que se traduce en “oficio de cantores”).

Desde la persistencia (representada por un bajo, único miembro fundador del Coro todavía en actividad), a partir de la experiencia de una directora con décadas en el cargo, mediante el encantamiento de una voz soprano solista, pero sobre todo gracias al desenvolvimiento colectivo de 27 coreutas, ensamblados como para sonar cual instrumento afinado, con múltiples acordes de registros diversos y a la vez compacto en su solidez, el Mester maravilló una vez más. No es casualidad que a la salida del Templo, un vecino con mucha experiencia en ser habitante de Laguna Redonda exclamara: “¡Este Coro es un orgullo para Trenque Lauquen, no muchos lugares pueden contar con algo de semejante nivel!”. Nadie que haya estado en el Templo esa noche lo iba a desmentir…

La directora, Laura Inés Carabelli, ofició también como “locutora oficial”, con la misma solvencia por todxs reconocida, sea moviendo manos y cuerpo (a falta de material batuta) para generar entradas de las cuerdas y modular intensidades del despliegue vocal, sea hablando y/o leyendo en la presentación de cada obra a interpretar (con el detalle del significado en castellano de las letras en alemán o inglés). Así fueron transcurriendo, entrecortadas por vítores y aplausos que nunca decayeron: “Heroes pugnate”, obra del Renacimiento austro-húngaro (de Jacobo Gallus); “Ave María”, versión del compositor español Javier Busto; “Abschied vom Wald / Despedida del Bosque”, obra del Romanticismo alemán, de Mendelssohn; “Jagdlied / Canción de caza”, del mismo periodo y autor; “Oración del remanso”, de Jorge Fandermole y Eduardo Correa (en ritmo de chamamé); “Preludio”, sobre textos de Federico García Lorca y con música de Manuel Oltra, una canción que el Mester estrenó en esta ocasión; “Opa Opa”, tradicional de la isla de Pascua, con palabras polinesias, armonizada por Marco Dusi; “Milonga del trovador”, de Piazzola y Ferrer (versión coral de Alberto Tramontana), dedicada al coreuta ‘Bachi’ Genoni, ausente por motivos de salud; y “Nobody knows”, negro spiritual, en cuya interpretación se destacó la voz solista de Mariana Luaces.

Claro está que a esa altura, además de los gritos de ¡Bravo! y los aplausos, con parte del auditorio de pie, se esperaba el bis: restaba otro negro spiritual, “Ride the chariot” (versión coral de Henry Smith), con el Coro llenando todos los espacios del Templo, casi treinta voces afinadas y coordinadas mediante, y la nueva, deslumbrante, intervención solista de Mariana Luaces. No se podía culminar de mejor forma, y la salida de lxs coreutas, respondiendo con sonrisas satisfechas a medida que los aplausos y comentarios de felicitación coronaban el paso hacia la entrada del Templo, sin perder intensidad hasta que el último protagonista hubiera pasado, graficó la calidad del concierto brindado y recibido.

En 1980 empezaron a ensayar, en 1981 tuvieron la primera actuación, y en 2022 (cuarenta y dos años después) deslumbraron con una presentación que habla de la vigencia del Mester de Juglaría. La veteranía ayuda, pero el secreto es el trabajo apasionado de cada semana, durante décadas. “Un orgullo para Trenque”, dijo el vecino también veterano, poseedor de una destacada capacidad analítica, y fácilmente consiguió unanimidad en la adhesión a su mirada…