Claudio Maldonado, más de 40 años enseñando básquet a los chicos de la ciudad

Claudio Maldonado, más de 40 años enseñando básquet a los chicos de la ciudad

Con un carisma especial y una llegada única a los chicos, Claudio Maldonado lleva más de 40 años en la docencia del básquet trenquelauquense y es un

Con un carisma especial y una llegada única a los chicos, Claudio Maldonado lleva más de 40 años en la docencia del básquet trenquelauquense y es un sinónimo de este deporte en la ciudad.
A los 63 años, repasa en una entrevista con FM Tiempo el camino recorrido en el básquet, en el que se inició desde muy chico, pero sobre todo desde su llegada al Club Argentino donde es un referente histórico.
De jugador a entrenador, Maldonado destaca la cantidad de jugadores que pasaron por sus manos y muchos de ellos con una carrera ascendente y prometedora, aunque lo que más se destaca es su capacidad de llegar a los chicos, de transmitir valores bien, de la sana competencia y parámetros para la vida, algo que no abunda en nuestros días.
“Los chicos en nuestros días han perdido la experiencia motriz por el uso de la tecnología y porque juegan menos en la calle que lo que hacíamos nosotros antes” dice sobre sus nuevos alumnos. El “profe” tiene a su cargo todas las categorías menores en el FBCA y ya no entrena a la primera desde hace algunos años.
“Al básquet empecé jugando en el año 70-71. Somos los primeros mini de Trenque Lauquen, íbamos a las clases que dictaba Oscar Brua”, recuerda y enumera entre sus compañeritos de la época Marcelo Nondedeu, Pedro Acharandio, Carlos Garbarino, Juan Carlos Ponti “íbamos al culto de Lucio Casas a jugar con los aros de básquet”.
“Todos éramos del barrio de Ferro y jugábamos en el club, yo jugué ahí hasta los 18 años hasta que me fui al Servicio Militar”. Había mucha actividad en “Carapachay, Ferro, Monumental, Barrio Alegre, Argentino”.
Cuando regresó de su paso por el Ejército fue invitado al FBCA donde Roberto Larrubia estaba encarando una revolución, al poco tiempo ya daba clases y no se fue más. “Soy entrenador de básquet, sigo rindiendo reválidas todos los años y cuanto más grande más fácil es entrenar”. El club “siempre mantuvo la idea de jugar en primera con chicos del club”.
“Desde que lo armó Roberto Larrubia el básquet en el FBCA no se cortó nunca más, tengo camisetas de la década del 70 en mi museo personal” la de ser entrenador “es una tarea de muchas horas, en un momento llegamos a tener 300 chicos durante todo el día y participamos de distintas ligas, campeonatos y muchos viajes”.
“Uno está atento siempre a lo que le pasa a los chicos que muchas veces vienen y te hablan a vos cosas que no le dicen a los padres. Es importante que practiquen el deporte pero también que sigan pautas y disciplinas, del mismo modo la atención que deben tener”.
EL FUTURO DEL BÁSQUET
Dijo que Trenque Lauquen tiene buen semillero y que no hay diferencias con las ciudades más importantes del básquet. “El básquet se mejora con la competencia bien organizada y que se cumplan todos los objetivos que se plantean pero no es fácil”.
“No pienso en mi retiro, me encanta enseñar a los chicos, es una gran satisfacción ver a donde llegaron algunos de los chicos que entrenaba desde muy pequeños. El básquet me dio un medio de vida, muchos amigos, hemos formado muchos chicos, a Trenque Lauquen le vendría bien tener varios clubes de básquet”.
-El campeonato regional de primera división del 2023 lleva tu nombre ¿cómo tomaste eso?
-Es algo lindo un reconocimiento, ¡pero eso no quiere decir que vaya a retirar!. (Ríe).
-¿Sentís el reconocimiento de la comunidad?
-Soy de un perfil bajo no busco el reconocimiento pero me hace bien caminar por la calle y que mucha gente me salude y me diga que fue al club a aprender y que le sirvieron mis clases. Soy un agradecido al FBCA a las subcomisiones de básquet, a los chicos, a sus padres, todas las cosas que se hicieron en el club fue por el empuje de los vecinos y la colaboración de la ciudad. Se siguen haciendo cosas y siempre hay cosas para mejorar.
En el final dice que una de las iniciativas de la subcomisión es cambiar el reloj tanteador que se compró hace 40 años cuando él comenzó a dar clases en el club, el aparato que marca el mismo ritmo que su tarea en la institución, un tiempo que promete continuar junto a los chicos que eligen este deporte.