Para contar la historia de Dante Oscar Fleki Sosa y la música hay que remontarse a los inicios de sus primeros días, y a su Mauricio Mayer natal, un
Para contar la historia de Dante Oscar Fleki Sosa y la música hay que remontarse a los inicios de sus primeros días, y a su Mauricio Mayer natal, un pequeño pueblo pampeano donde vivió su infancia y conoció la guitarra, un amor a primera vista que ya nadie pudo volver a separar y perdura hasta nuestros días.
La semana pasada cantó en música en la estación. Integra dos agrupaciones y mañana domingo viaja rumbo a Cosquín como lo hace desde 1998 de manera ininterrumpida a participar del escenario de las peñas cordobesas, un apasionado de la música que además muestra en sus pergaminos una presentación junto a Jorge Cafrune en sus inicios.
En una entrevista con FM Tiempo dijo que por los nombres no lo conoce nadie, y el apodo se le debe al cantante Tony Ronald a quien pretendía imitar con sus peinados y tenía un flequillo muy pronunciado.
“En mi familia no había músicos, pero mi padre escuchaba tango y por el dúo Carlos Dante y Oscar Larroca me puso esos nombres” recordó hoy con 68 años.
Nació en Mauricio Mayer La Pampa y como su padre era ferroviario se mudó mucho a lo largo de su infancia y adolescencia hasta que recayó aquí a los 25 años.
La guitarra llegó a su vida por intermedio de un tractorista que llegó en una campaña de siembra a su pueblo, en la casilla tenía una guitarra que era muy grande para él porque era niño, y en un papel le anotó las notas, hasta que su padre una vez le compró una guitarra. Eran tiempos difíciles y le ayudaba a su padre en la caza de liebres, para hacerse del instrumento entregó los cueros de las liebres en una barraca en Colonia Varón.
“Siempre aprendí de oído y mirando, nunca aprendí bien porque nunca fui a estudiar. Empecé tocando en la escuela junto a un compañero que tocaba el bombo, con él comenzamos a hacer una agrupación. Estábamos en Quemú Quemú y aparece Jorge Cafrune, en una peña donde nosotros tocábamos, él nos vio ahí y nos invitó a tocar a un festival de doma en Roosevelt partido de Rivadavia, ese día actuaban los Indios Tacunau que venían de la consagración de Cosquín”.
Hace 24 años viaja a Cosquín con excepción de la pandemia. “Me encanta ir empezamos a ir con Los Sosa`s a las peñas callejeras y en 2003 sobre 1600 bandas quedamos entre las últimas 10 y grabamos un CD”.
Ahora toca con Los Reyes de la Peluquería y Barajacal dos agrupaciones folclóricas con las que se presenta en festivales locales y regionales.
“La música es todo, la música es una pasión, te saca de todos los problemas. Como dijo Atahualpa Yupanqui la música es la que va a salvar al mundo, vos estás haciendo música y te estás olvidando de todos los problemas que tenés, te olvidas de todo. Te tiene que gustar, por supuesto yo muchas veces no voy a cantar a los asados porque por ejemplo vas a un taller y todos quieren hablar de motores y autos y está bien que sea así entonces cantando están interrumpiendo ese momento. La guitarreada se hace entre guitarreros. Eso me lo enseñó un salteño” dijo como sentencia final.