Fue el arte o la medicina su primer despertar. No es una pregunta que pueda responder con facilidad. En su Salto natal, María José Roncallo transcurr
Fue el arte o la medicina su primer despertar. No es una pregunta que pueda responder con facilidad. En su Salto natal, María José Roncallo transcurrió su infancia entre lienzos de acuarela, bocetos de obra de teatro, partituras musicales; delantales blancos y recetas de medicamentos, como hábitat natural de una casa de médicos y artistas.
Recuerda sí, que sus primeras clases de piano las tomó a los 9 años. Pero ya sabía a esa altura que sería médica, como su madre Iris y su padre Néstor. La pulsión familiar no sólo la llevaría a la órbita de las ciencias, sino que también le transmitió su fascinación por el arte. Estudió piano y violín, actúa en obras de teatro y también pinta acrílicos que hoy expone en Trenque Lauquen.
Su obra, que por primera vez muestra al público en el consultorio de la calle Urquiza, es la excusa para hablar del recorrido de esta médica endocrinóloga instalada en Trenque Lauquen hace dos años, cuando por decisión familiar se radicó junto a su marido el trenquelauquense y también médico Juan Manuel Yarza en esta ciudad.
“Mi madre siempre pintó y nos inculcó el arte. También escribe y dirige teatro, mi hermana es bailarina clásica, venimos de una tradición de arte” dice la médica entrevistada en el programa OESTE BA RADIO DE FM OMEGA.
A pesar de su condición multi-instrumentista con formación académica pudo haber elegido también el camino del aprendizaje formal para su vocación de artista pictórica, pero no; decidió hacerse en el hacer y es una pintora autodidacta.
“Mis pinturas son copias, son obras que me piden amigos o que voy descubriendo. Ahora estoy exponiendo obras de Milo Locket y Manuel Paz, las elegí porque un contexto de un consultorio médico son adecuadas por sus trazos y colores”.
Pero “nunca tomé clases. Tiene que ver con la tradición familiar” dice y cuenta que su hermana también le ayuda con las pinturas. Hay obras que son fusiones que hacemos con mi hermana. Si bien es una obra inspirada en el original, uno siempre le da una impronta personal”
La exposición que hoy tiene en vigente es una cuidada selección pensada con espíritu conceptual. Sin embargo, no hay composiciones propias ¿por qué? “Por ahora no lo hago, podría probar con lo abstracto pero es algo pendiente aún. Entiendo que para eso sí debería tomar clases”.
TRENQUE LAUQUEN
Para ella, Trenque Lauquen fue un despertar. Sin la vorágine de la Ciudad de Buenos Aires, la familia encontró tranquilidad, tiempos y una oportunidad única que le permitió echar a volar su vocación artística.
Volvió a las clases de piano (con Marisa Mestre) y a la Escuela de Música para tocar el violín. “La carrera de medicina y el trabajo me hizo dejar de lado durante un tiempo el arte pero lo estoy retomando ahora que tengo más tiempo. Trenque Lauquen tiene una gran oferta en el arte y la cultura, y la ciudad ha sido un renacer para mí en términos culturales”.
-¿Cómo combina la Medicina y el arte?
-La mayoría de los médicos tenemos otra parte que tiene que ver con la cultura. En mi familia nuestro ejemplo es mi madre, que escribe y dirige teatro, pinta cuadros, etc. nosotros sus hijas siempre participamos en los torneos juveniles en teatro, escultura, pintura, danza, etc. crecimos así. Es algo que tengo incorporado desde hace muchos años. La Medicina es una forma de arte, no es una ciencia abstracta y por eso se relaciona con el arte, conozco muchos profesionales de la salud que tienen otro lado con respecto a la música y la pintura y en algún punto ambos mundos se integran.