A Alejandro Lasa siempre le gustó la música, el rock de los 80 y su influencia en la generación que ahora peina canas. También siempre le gustó la g
A Alejandro Lasa siempre le gustó la música, el rock de los 80 y su influencia en la generación que ahora peina canas. También siempre le gustó la gastronomía, el arte de la cocina y tuvo una aproximación a la elaboración de cerveza aunque nunca lo concretó. Con la pandemia y la llegada de la hora del gin, se subió a la moda de la espirituosa bebida con su propia marca que ya es un sello en la ciudad y se posiciona en el mercado.
De esas dos pasiones, la música y el arte de la elaboración de bebidas, surgió el nombre Xymox Gin, un desprendimiento de la banda holandesa “Clan of Xymox” que supo dominar la escena dark y gótica del rock europeo hace algunos años. En este 2024 tocaron en Argentina, y aunque no pudo ir al recital les hizo llegar unas botellas que los legendarios roqueros postearon en la cuenta oficial de Instagram de la banda.
En sus inicios “surgió por curiosidad” y luego “por intermedio de unos amigos que viven en Rio Grande que destilaban comencé a interiorizarme, hice cursos y en un momento comencé a producirlo” contó a oesteba.com.ar-
Comenzó a mediados de 2022 y en octubre ya estaba realizando las primeras pruebas “los primeros ensayos se tomaron en los asados con los amigos, luego fuimos mejorando el proceso para dar mejor tomabilidad sin impacto alcohólico, sabor, etc.”. Todas las semanas produce aquí en Trenque Lauquen pero también “tengo el auxilio de producción en cantidad que es lo que te da volumen y entras en el radar nacional para entrar en el mercado más grande, hacen tu fórmula, tu gin, pero lo envasan en otro lado. Aquí yo compro los insumos y hago todo y una parte de la producción va a barriles de gintonic preparado que anda muy bien porque se usa en confiterías, casamientos, cumpleaños, etc. es algo muy práctico porque te evitas la preparación y el desperdicio, ni midiendo, ni nada”.
En la actualidad produce tres variedades: cítrico y floral “que son de composición clásica”. Luego “hago un gin especiado que es más complejo en cuanto a los botánicos que lleva. Vamos a ver si en el invierno hacemos alguna prueba para otra variedad para primavera o fines de año”.
Su producción es familiar, lo hace solo con su esposa y la ayuda de sus hijos y aunque aclara que le cuesta lo del marketing y las cuestiones que circundan en relación al negocio y la marca, quiere seguir en esta actividad, vinculado a una bebida a la que todos le dan larga vida.
