Delegadas municipales en los pueblos: cuando las mujeres mandan

Delegadas municipales en los pueblos: cuando las mujeres mandan

En los distritos del interior, como los nuestros, los pequeños pueblos tienen delegados municipales. Es una figura polifuncional porque resuelven sob

En los distritos del interior, como los nuestros, los pequeños pueblos tienen delegados municipales. Es una figura polifuncional porque resuelven sobre salud, cloacas, poda, corte de pasto y todos los temas que involucran a la Municipalidad y también suele ser un espacio reservado para hombres.

Sin embargo, algunas excepciones aparecen en la regla en nuestra zona. Se trata de los casos de Mirta Folco en Girodías (Trenque Lauquen), Graciela Dómine en Bocayuva (Pellegrini) y Patricia Bascal en González Moreno (Rivadavia), mujeres que son delegadas municipales y rompen con los estereotipos de la función pública en las pequeñas localidades.

Mirta Folco asumió el 9 de septiembre de 2016 como delegada municipal de Girodías, en el partido de Trenque Lauquen. Es una de las poblaciones más pequeñas de este distrito, con 200 habitantes pero tiene una 

“Para mí no es difícil porque no tengo problemas, tenés que estar atenta a todo lo que pasa en el pueblo. Es un pueblo chico pero con mucha actividad” dijo la entrevistada.

Girodías tiene 200 habitantes y tiene un fuerte movimiento económico agropecuario. En lo concerniente al Municipio, la Delegación cuenta con una sala de primeros auxilios y la escuela municipal, pero también tiene que prestar los servicios como riego de calles, corte de pasto, poda, reparación de calles, iluminación y otras cuestiones. 

“En una delegación se hace todo, tenemos poco personal pero buenas herramientas, de a poco fuimos incorporando herramientas nuevas para poder trabajar. Sentimos mucho el acompañamiento de Trenque Lauquen y también de 30 de Agosto” y destacó el trabajo con educación de la provincia y la policía bonaerense.

“Nunca sentí que por ser mujer me generara algún problema, por el contrario. Yo si tengo que plantarme ante determinados temas lo hago, y muchas veces por ser mujer se la tienen que aguantar más” dijo y rió. 

La localidad tiene una escuela primeria y una secundaria, además de un jardín maternal, de infantes y comedor escolar “si tuviera que elegir un tema a resolver sería la ampliación de la escuela que queda chica”.

BOCAYUVA, EN PELLEGRINI

La localidad pellegrinense de Bocayuva tiene 108 años de vida. Es un pueblo con casi 200 habitantes que lucha para crecer y desarrollarse. Su delegada es Graciela Dómine, asumió cuando llegó al gobierno municipal, Guillermo Pacheco, el 10 de diciembre de 2015.

En estos días está de licencia y fuera de la ciudad por un problema de salud de un familiar, pero a pesar de todo tuvo la amabilidad de atender a este diario y ser parte de la propuesta de esta nota. Un hecho que marca su vocación de servicio.

“A mí no me ha sido ningún impedimento ni ningún problema poder ejercer el cargo por ser mujer, siempre con el apoyo y la contención del equipo de gobierno de Pellegrini encabezado por el intendente Pacheco pudimos concretar muchos proyectos y siempre seguimos proyectando nuevas cosas”, dijo la funcionaria.

Bocayuva se fundó en 1913. Tiene el trazado del pueblo, la estación del ferrocarril, la capilla, la escuela, el club y la infraestructura necesaria para el crecimiento. Sin embargo, producto del cese del servicio de trenes y la emigración de los jóvenes a las ciudades más grandes hicieron que menos gente decida vivir allí.

Cuando hace un año entrevistamos a la delegada ella dijo que no sólo estas variables históricas jugaron en contra de emigración, sino también porque durante muchos años se hizo poco en la localidad, cosa que cambió en los últimos años con obras de viviendas, iluminación y una fuerte intervención urbana con desagües y obras clave.

El desafío “es que se mantenga vigente a pesar de lo chiquito del pueblo haciéndolo crecer y que tengamos oportunidades como tienen en cualquier ciudad porque al ser estas comunidades chicas por lo general tienden a más que nada desaparecer”, dijo hace un año la delegada con entusiasmo y empuje.

GONZÁLEZ MORENO, EN RIVADAVIA

González Moreno es una ciudad de 2500 habitantes en el distrito de Rivadavia y la particularidad es que es limítrofe con General Pico, La Pampa, por lo que tienen mayor interrelación con esa ciudad pampeana que con las bonaerenses e incluso muchos de sus habitantes tienen domicilio del otro lado de la frontera provincial.

Patricia Bascal es la delegada municipal desde hace 1 año. Hace unos días concretó un acto con la entrega de terrenos para viviendas “hay falta de casas para alquilar, para comprar y esta es una gran ayuda. En ciudades como éstas no hay casas disponibles para alquilar por eso están los esfuerzos de la Municipalidad para poder atender esta demanda” dijo entrevistada por este diario.

Es una ciudad limítrofe con La Pampa “y tenemos más relación con General Pico que con la parte de la provincia de Buenos Aires, por eso este tema del covid nos generó muchas dificultades por los cortes de ruta. Hay muchos vecinos que tienen domicilio en La Pampa”.

Sobre su historia dijo “hace un año que asumí. Antes fui delegada interina, y soy empleada municipal, decidí enfrentar este desafío que no es fácil, a una mujer se le complica en la parte urbana. Es una localidad grande, siempre fuimos de las más grande del distrito por eso hay requerimiento de servicios y una agenda que es amplia”.

“Fue un año atípico y difícil pero pudimos salir adelante con la mejor predisposición acompañando al pueblo, la gente nos acompaña mucho y tiene paciencia y es tolerante con cosas que aún no hemos podido llegar pero seguiremos avanzando, la gente siempre nos apoya y nosotros seguimos de cerca la cuestión social que en un año como este se hizo más difícil”, le dijo a OESTE BA.