Unas imágenes que hablan de la gente de su pueblo

Unas imágenes que hablan de la gente de su pueblo

En el acceso a Tres Lomas las gigantografías no retratan las medallas doradas de los deportistas exitosos, como ocurre en muchos distritos de la provi

En el acceso a Tres Lomas las gigantografías no retratan las medallas doradas de los deportistas exitosos, como ocurre en muchos distritos de la provincia, sino que portan las postales de vecinos del pueblo, que hablan de la sociedad y la comunidad.

De alguna manera se refieren a lo que León Gieco describe en la canción La Memoria, “los viejos amores que no están”, a vecinos entrañables que dejaron su huella en la comunidad, porque transmitían valores, generaban empatía y se hicieron querer de tal manera que los identifica y hoy los recuerdan con esos carteles gigantes que todos los automovilistas que pasan por la ciudad los pueden ver.

Pero tampoco llegaron ahí de manera azarosa ni contingente, sino que fueron el blanco del lente de sus propios vecinos. Las fotos fueron seleccionadas en un concurso fotográfico local que organiza la Municipalidad anualmente y esta postal final a la vera de la ruta es un justo homenaje a Néstor “el indio” Salvá muy recordado por todos sus vecinos porque vendía huevos y se trasladaba en un sulky, y también al gran Ruben Gil, en su triciclo con el que competía en todas las pruebas atléticas de la región, un grande en todos los sentidos. La imagen lo capta cruzado las vías, una imagen fantástica.

Susana Cavallero es la directora de Cultura de Tres Lomas, y atiende el llamado de Oeste BA para contar la historia de las fotos. “Aquí hacemos una maratón fotográfica y en cada año hay distintas temáticas para llevarla adelante, algunos de ellos tiene que ver con los personajes de Tres Lomas” por eso Salvá y Gil.

“Es una maratón fotográfica que también ha abarcado otros temas. Se logran imágenes de distintas locaciones y condiciones climáticas. Después se hace una muestra, eligiendo una por tema. Se exponen todas y se entregan los premios”, dijo la funcionaria.

“Ahora lo que estamos haciendo no dimos premio a la más lindas sino a la participación y el premio fue  ir a Sierra de la Ventana con este objetivo de tomar fotos”. Entre las fotos ganadoras eligen las que tienen destino de gigantografía, hoy nos saludan Salvá y Gil desde lo alto en el ingreso a la ciudad.