Julieta y Agustín derribaron el mito que amor y trabajo no pueden ir de la mano. Son arquitectos, responsables del estudio A+B. Hace casi 10 años
Julieta y Agustín derribaron el mito que amor y trabajo no pueden ir de la mano. Son arquitectos, responsables del estudio A+B. Hace casi 10 años abrieron su espacio desde el que diseñan, proyectan y ejecutan obras en el ámbito público y privado, algunas de ellas de alto impacto en la sociedad como la Plaza San Martín y otras vinculadas con comercios y viviendas.
Su historia empezó mucho tiempo antes y en el barrio. Se conocen desde niños porque vivían cerca en el sector Este de la ciudad. Julieta Buffarini era amiga de la hermana de Agustín Antonio en la infancia. Sin embargo, el amor tardó en llegar y fue en La Plata, a donde ambos fueron a estudiar Arquitectura. Agustín estaba en Cuarto Año cuando desembarcó Julieta, se ofreció a ayudarla con los primeros apuntes y armaron esta historia de amor que ahora tiene además un bebé.
En la ciudad de las diagonales comenzaron a dibujar su horizonte. Siempre pensaron en trabajar juntos y la clave, dicen, es que la atmósfera laboral no puede mezclarse con el ámbito familiar.
Ambos son la primera generación de profesionales de sus familias de clase media trabajadora y también los dos pasaron por la ex ENET aunque con mayor o menor vinculación, ya que Julieta sólo hizo dos años por aquella famosa reforma del Polimodal “no sé por qué estudié arquitectura hoy creo que fue la mejor decisión porque tengo una gran satisfacción cuando entro en este espacio es como entrar en una órbita de producción total, hoy con el bebé en mi casa no trabajo aprovecho muy buen estas horas que estoy acá” dice ella la primera en abrir el fuego en la charla.
“Siempre pensamos en trabajar juntos y tenemos un acuerdo que las horas del trabajo son trabajo, ahora tenemos un número sólo de trabajo que se apaga a determinada hora” aclara Agustín.
Estuvieron en La Plata hasta el año 2015 sumando mucha experiencia. Agustín trabajaba para un estudio especializado en urbanismo y ejecución de infraestructura, ese dato le valió el llamado del Municipio para que venga a ejecutar las primeras obras en la Ampliación Urbana y fue el inicio de su regreso a la ciudad. Julieta también contaba con horas de vuelo en un estudio especializado en obras
De la mano del Municipio llegaron las primeras direcciones de obra como cordón cuneta, los baños del Skate Park, y el jardín nubecitas, y el teléfono empezó a sonar para viviendas privadas y ampliaciones.
“Nosotros damos el servicio de anteproyecto con todo el diseño y toda la información en una carpeta que cuando el cliente quiera ejecutar la obra con el arquitecto que quiera tengo todo tabulado” dicen.
En el último tiempo decidieron dedicarse a obras de diseño comercial. “Son más dinámicas, con otros tiempos”. Entre otros comercios intervinieron Tienda Literaria, Petrolauquen, La Casa del Sol, estación de servicio Puma, Estocolmo, Centro de Piel, Advanta, Bridgeston “y también hemos diseñado muchas que por el momento no se ejecutaron”.
LA PLAZA
Un punto de inflexión en sus vidas profesionales lo representó el llamado del Municipio para ejecutar la obra de remodelación de la Plaza San Martín. “El proyecto ganador del concurso es de La Plata, a nosotros nos convocaron para una parte de la ejecución la fuente de agua, el monumento, veredas, rampas. Son las intervenciones más importantes” recuerdan y ríen cuando mencionan algunas anécdotas “algunos días la gente nos abucheaba cuando movimos el monumento o corrimos los rosales a mucha gente grande no le gustaba lo que hacíamos, pero fue muy satisfactorio ver el resultado porque los vecinos se apropiaron de la plaza”. También hicieron la ejecución de la infraestructura del puente del Parque, Plazas saludables, el SUM del CEC 802 y refacciones en la escuela de Magnano y la 35.
“Por suerte tuvimos varios trabajos en menos de 10 años. Es importante que te tengan en cuenta para trabajar en el ámbito público o privado. En esta profesión tienes que ir renovándote todo el tiempo y buscando variables, renovar y actualizar” sostienen como las claves para los tiempos que corren.
Los chicos nunca se fueron del barrio, su estudio se encuentra en el lugar donde todo comenzó esa mezcla de amor y creatividad presente en la fusión, como una fórmula de sumatoria como A+B.