Una cooperativa de mujeres trabaja en proyectos de agricultura sustentable

Una cooperativa de mujeres trabaja en proyectos de agricultura sustentable

Con  el apoyo del Ministerio de Agroindustria bonaerense y de la Municipalidad de Rivadavia, la cooperativa de madres solteras Las Mamis trabaja

Con  el apoyo del Ministerio de Agroindustria bonaerense y de la Municipalidad de Rivadavia, la cooperativa de madres solteras Las Mamis trabaja en proyectos de agricultura sustentable: como una huerta orgánica y la elaboración de hongos a través de un proceso de residuos de poda. Actualmente se encuentran en la etapa de construcción de la infraestructura.  

“Mamis” es el nombre del programa Municipal de Apoyo Integral a la Mujer de la Municipalidad de Rivadavia. Hay unas 40 chicas que aprenden oficios y reciben contención porque muchas de ellas atraviesan situaciones de vulnerabilidad. Sus emprendimientos ocuparon espacios en distintos medios de comunicación porque desde hace 4 años tienen una fábrica de ladrillos ecológicos cuya producción es adquirida por el Municipio para darle solución a distintas emergencias habitacionales.

Las Mamis tienen talleres de costura y otros emprendimientos y el gran desafío siempre fue que se pudieran constituir como cooperativa y comenzaran un camino que les permitiera obtener sus propios ingresos sin la tutela del Estado. En ese recorrido andan por estos días, ya que luego de la firma de un convenio con la Provincia, obtuvieron el financiamiento para dos proyectos productivos que además son ecológicos.

Susana “Tuti” Torres es la coordinadora del equipo de madres y del otro lado del teléfono muestra su entusiasmo por cómo las cosas se van poniendo en su lugar. Si bien, el grupo Las Mamis sigue funcionando, ahora la cooperativa de trabajo se llama Hansen (mujer con alma buena) e integran 18 chicas. Son las que firmaron el convenio con el Ministerio de Agroindustria. “Presentamos un proyecto hortícola de dos etapas, la primera es una huerta orgánica y la segunda etapa es para la producción de hongos”, dijo a OESTE BA.

Pero el proceso lleva su tiempo. “Estamos en la primera etapa que es el armado de los túneles, el tensado de alambres, etc. tenemos una dirección técnica del trabajo que se licitó y que es monitoreado desde General Pico.

Las chicas ya cuentan con un galpón cerrado que es donde van a encarar la producción de hongos. “Tenemos el acompañamiento del INTA, de la Provincia y del Municipio “estamos capacitando a las chicas, y una posibilidad es que parte de lo producido vaya a las cocinas de hospitales, jardines y distintos estamentos estatales” dijo y remarcó que “en otros lugares no pueden creer el capital humano que tenemos, porque las chicas son capaces de hacer todo”.

Residuo Cero

El Ministerio de Agroindustria bonaerense publicó en su página web, que impulsa la implementación del modelo de Bioeconomía en la Provincia como motor del desarrollo local, y está llevando adelante un proyecto piloto en la ciudad de América, Partido de Rivadavia, que podrá ser replicado rápidamente en otras localidades de la Provincia. Se trata de un proyecto de Residuo Cero que se basa en la producción de hongos comestibles en el que participarán las integrantes de la Cooperativas MAMIS, madres solteras en situación de vulnerabilidad.

A partir de restos de poda  de arbolado urbano  se producen las especies de hongos Pleurotus y Shiitake. Le sigue fase orgánica de residuos sólidos urbanos y residuos agrícolas; el chipeado de la materia orgánica para formar el sustrato a partir donde se cultivarán los hongos. Se pasteuriza utilizando una caldera que usará ese chipeado de poda como combustible, se inoculará el hongo, se incubará y, por último, se cultivará.

Esta gestión integral de residuos sólidos urbanos disminuye el riesgo de incendio al aprovechar la biomasa disponible como materia prima, aporta a disminuir la contaminación ambiental al utilizar residuos que ya no irán a un basural, aporta a ampliar la oferta laboral, aporta al desarrollo local y genera una nueva oferta al turismo gastronómico.

A su vez, se prevé que parte de la producción se destine a enriquecer la dieta de los comedores escolares ya que estas especies son muy ricas en proteínas, vitaminas y minerales. Se trata de producto de gran calidad nutricional que contribuirá al mejor desarrollo y aprendizaje de los chicos.